
Justo cuando todo parecía tomar un rumbo seguro, fue segura mi caída en picada. Picada con todo lo que se te ocurra comer, lo dejo a tu elección. Total sé que cuando llegue el momento en que me caiga una patada al estómago, voy a vomitar todo lo malo. Patada que la vida me está dando para hacerme fuerte, pero prefiero hacer abdominales en todo caso.
El caso es que no entiendo más nada. Nada de lo que hago parece estar bien, o no es lo correcto. Corrrrrrrrrrrrrrecto, me está yendo mal. No era difícil darse cuenta.
¿ Cuenta decir que nunca tuve malas intenciones ? Intenciones de lastimar a nadie ni hacer mal las cosas. Cosas que hoy me están volviendo loca; siempre llevé conmigo un poco de locura. Hoy está acompañandome, fiel a mí. Una de las pocas cosas que me van a ser fiel & no entro en detalles.
Detallista no hay que ser. Mirar las cosas ligeramente por encima nos hace evitar tragos amargos, es la vida que nos juega malas pasadas. Pero como pasadas son, hay que pasarlas.
Pasame la botella, hoy quiero emborrachar mi corazón que muere de amor. Es imposible morir de amor, es todo una mentira. El amor nunca nos va a llevar a morir, si a matarnos. Está mal hecha la frase. Ni siquiera aquel que se mata lo hace por amor, desamor tal vez. Es muy fácil echarle la culpa al amor & decir es una razón para morir, en vez de buscarle la vuelta.
Otra vuelta de tuerca necesito, tengo los tornillos flojos. No, digamos que tengo los clavos que no corresponden clavados muy en el fondo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario